miércoles, 17 de diciembre de 2014

La autoridad deshonesta


Un joven padre un día martes regresa temprano a su casa  de su trabajo, y se dispone salir a jugar pelota con sus amigos  en la losa deportiva del barrio cuando su mujer, joven también, le dice que vaya a comprar leche y pañal.
El joven va al cajero cerca  a su casa a sacar dinero (200 soles) y luego de la operación, al cruzar la calle en dirección a la  farmacia, oye el estrépito de un disparo de bala.
Se da vuelta, instintivamente,  para regresar a su casa cuando un señor vestido de civil, ahora, le dispara a dos metros de distancia; herido de bala en el hombro, es jalado e introducido en  el asiento trasero de un auto. Adelante hay una  mujer y el hombre  que disparó,  policía vestido de civil,  le pregunta a la mujer ¿Fue él quién le robó su cartera?
- ¡No señor, no fue él!
El policía, que también vive por el lugar pero no le conoce al joven, al oír los gritos de la mujer, momentos antes, había salido raudo por ayudarla.
Ahora le lleva al herido al hospital , está sangrando, mientras, por sus declaraciones, el joven le enseña el voucher del cajero automático , etc., se da cuenta de su error  pero no  reconoce haber actuado precipitadamente sino, qué, mientras al joven le atienden en el tópico del hospital le hace un atestado acusándole de robar a la mujer –inventa- al ser interceptado  portaba un cuchillo dispuesto agredirle por lo que tuvo la necesidad de usar su arma y, luego,  al registrársele le halló droga –le había sembrado-
El padre del joven,  la día siguiente  del hecho y corroborar por todos los ángulos que fue  abuso de autoridad del policía quién hecho el atestado ya no se sabe nada de él, va a la televisión y denuncia  los pormenores.
En represalia por esta denuncia pública un contingente de policías  invade el nosocomio y saca al mal herido joven sin que termine su curación y lo llevan a la cárcel.
…….
El padre ha tenido que luchar seis meses para poder sacar a su hijo de la cárcel  ya que el juez del caso ve que no había sustento para los agravios.
El brazo del joven le cuelga –se ve en nueva emisión  por el mismo canal de tv-  el hueso no ha logrado soldar Necesita otra cirugía.
Aun así, no está libre del todo, tiene que continuar el  juicio por comparecencia.
No sería raro, en este país, que la fiscalía le pida volver a la cárcel.
Así se hace la justicia en este país.
Cuando si seria  honesto el policía  hasta la familia del muchacho hubiese comprendido el error. Pero esa artimaña del mal policía genera un gasto público al estado por el juicio y otros; y sobre todo  al muchacho y su familia.

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