Una señora y su hijo mayor quieren comprar dos departamentos contiguos
para estar juntos, uno para ella y el otro para su hijo. Van a una Casa Show
que reúne a las compañías inmobiliarias más conocidas y de garantía, es una tienda por departamento
exclusivamente para viviendas.
Eligen una propiedad, tal sitio, tal precio y pagan al contado para
tener mejor descuento y hacen un
contrato de compra venta.Mamá e hijo se turnan mensualmente para ver el avance de la obra. El primer mes ven que están trabajando, ven que hacen un socavón para los cimientos y notan en un letrero que dice que el proyecto debe acabar en un año, el ingeniero al mando le dice que, incluso, lo van a llamar para que elijan el color, y la calidad en los acabados de cocina.
En el segundo mes notan que la obra no avanza y el tercero paralizan la obra.
Van a la tienda por departamentos y le dicen que la inmobiliaria en cuestión ya no pertenece a la casa show.
-¡Pero ustedes son los responsables porque albergan a una empresa así!
-No, no somos, nosotros trabajamos con la evaluación de los bancos, ellos tenían el proyecto aprobado por el banco por eso le dimos un stand, ahora, el banco le ha quitado el auspicio. Vayan a reclamar al que le dieron el dinero.
Para la madre y el hijo es un mundo ubicarlo. Hacen la denuncia y la justicia a paso de tortuga en este país optan ir a la televisión hacer la misma denuncia, solo así ubican al empresario y conciertan una cita.
Entonces se llega a saber que el empresario antes de vender ya tenia deudas y para pagar la misma alquiló un stand de ventas en la casa show.
Contrató por corto periodo un grupo de obreros hasta que caiga el anzuelo. Madre e hijo pagaron 250.000 dólares. Cuando recibieron el dinero al poco tiempo paralizaron la obra.
Pero aquella suma no arregló el problema al empresario, la deuda es mayor, ahora resulta que el proyecto lo ha transferido a otro corredor de inmuebles.
Ese el panorama actual donde hay muchos condominios que no se pueden vender en Lima y estando la misma con hipotecas bancarias recuren a sorprender a mucha gente común.
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