El valle de San Pedro de Lurín, la hacienda Cañaveral,
pertenecía a la Congregación de San Felipe Neri pero éste lo concesionó ,
primero, a Gamarra, presidente del Perú, luego Egusquiza, luego José Rufino Eche
nique, presidente Perú 1851-1855, entre ellos se traspasaban los arriendos
siempre con la anuencia del propietario :la Congregación San Felipe Neri (a
quien, supongo, no le costó nada o poco, solo llegar entre los primeros al país y
estar atentos a la repartija para recibir lo suyo)
La última transacción entre Egusquiza y Echenique, por ejemplo, fue nombrado
un tal Basurto como tasador por ambas partes
de cuya contabilidad y análisis de
activos y deudas resultó a favor de Egusquiza la cantidad de 18.415 pesos,
incluido 4.000 pesos de laudemio que el tasador exigió sin excusa de lo que se le pagaron al
contado14.415 pesos a Egusquiza quedando los 4.000 pesos a para ser efectivo a
los acreedores de éste.
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