Asuntos de pareja
Muchos frívolos de nuestro género piensan que tener tras
bambalinas una querida de hermoso cuerpo, es ego que les resalta y, no les importa que lo vean sus amigos, porque
en esa cofradía de género-ego tapan entre ellos sus perdidas .
Es mejor, piensan, tener una amante cabeza hueca (o
que ésta simule ser) que una inteligente
que ponga en aprietos su estabilidad, en cambio, una cabecita de aserrín no peligrará su condición de padre
de familia ejemplar ni tendrá duda abandonar
el hogar
Y éste la conservará un tiempo Al final se dará
cuenta que la ola de ignominia erosionará
su capital humano: el Tiempo, tiempo perdido en demostrar entelequia falsa, que
no lleva a ningún lado, tiempo
desperdiciado que afecta a los implicados.
Entonces los baladíes del género incapaz a de labrar la arcilla en su propia
tierra y roturado su relación extra
busca otra casquivana inútil, a sabiendas, que es peor, para aplacar su ritmo
de vida, ahora sí, inútil; como el drogo o el alcohólico que para seguir su falsa felicidad necesita no separarse de la
inyección o su licor.
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