A mediado del siglo XIX La Parada, y
alrededores eran huerta y haciendas regadas por el río Huatica
Los terrenos eran de propiedad de la familia Gárate
que en 1846 lo transfirió a un joven militar que, luego, se convertiría en
presidente del Perú. José Rufino Echenique Benavente (ver libro Haciendas y Pueblos
de Lima, volumen I, de Fernando Florez-Zuñiga)
quién pagó 45,000 pesos por las 23 fanegada (unas 62 hectáreas) La fortuna
era de su esposa Victoria Tristán y Flores
En los días 15 y 16 de octubre de 1853 se dio una gran
fiesta con más de 2,000 invitados a la selecta sociedad limeña en el fundo (por
eso el fundo pasó a conocerse La Victoria
en honor a dicha dama)
…
En 1940, un fuerte terremoto sacudió Lima e hizo apremiante
la falta de viviendas, entonces, al poco tiempo, la familia Cánepa dona para un mercado unas
tres hectáreas a los comerciantes de Albaquitas que se situaban por Cinco
Esquinas, Barrios Altos, pero, éstos por
no formalizar la donación paso la
propiedad a la Municipalidad y surgió La Parada y, ahí mismo, San Cosme , San
Pedro y El Agustino (mi casa vieja) las primeras invasiones de los cerros mas
cercanos a Lima, ya que, al inaugurarse
La Parada, el centro de abastos más grande de Lima era necesario y preferible a los comerciante
vivir en los alrededores –en los cerros-, y evitar pagar alquileres de casa, pasajes y
ahorrar tiempo viviendo cerca
También aparece El Porvenir, conjunto habitacional
construido durante la presidencia de Manuel Prado.
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