Gustaba leer y mi padre en los almuerzos del domingo era el depositario de mis lecturas qué, muchas veces, cambiaba alguna palabra para dulcificarle, por ejemplo, el recuerdo de su pueblo
Decía yo:
Cuando alguien está aburrido de Quinches es que está cansado de vivir (Modificaba la alusión a Londres en la cita original del doctor Samuel Johnson, inglés)
Mi viejo quedaba impactado un segundo Luego reaccionaba y se dirigía a la persona mas cercana a su silla, por el lado contrario, y decía:
- ¡Oye lo que dice tu hijo! -a mi madre, en este caso:-
Cuando alguien está aburrido de Quinches es que está cansado de vivir
Entonces me miraba otro segundo y luego me ensalzaba Sentía que me miraba con orgullo y tenia fe que seria el divulgador de los tantos cuentos de su pueblo que él me había contado. Sentía que me quería y me respetaba, entonces, su promesa fue repetir esa frase a sus amigos en el Club Quinches (residententes en Lima del pueblo añorado que habian comprado un local para compartir una amena tarde) y quedaba relamiendo la frase:
Cuando alguién está aburrido de Quinches es que está cansado de vivir.
(Esta fue la alocución que me tocó recordar en el camposanto ante mi familia por el Dia de los Muertos)
cuando alguien esta aburrido de Quinches es que esta cansado de vivir
No hay comentarios:
Publicar un comentario