Mi padre Cenicio me dijo a mi y a mi hermana Matea:
"¡Qué hacen allí jugando! ¡vayan arrancar ichu siquiera!"
Mi padre techaba con paja la choza rústica,
casucha que nos serviría de alojamiento dos semanas
teníamos que aprovechar el cerro vestido de verde
para pastar nuestras cabras
Obedecimos
Fuimos a buscar ichu camino arriba.
Ichu... planta pegada a tierra en sitios inusuales
en el páramo, en el borde de los caminos,
en bordes de los tableros
En este canto, hice fuerza para sacarlo No podía
Pedí ayuda a mi hermana
Ambos hicimos fuerza
Se movió la tierra y cedió
¡pero nos fuimos de espalda!
¡hacia el borde...!
Rodamos por una inclinación
¡Nos íbamos a matar! llegué a pensar
Al acabar esa corta pendiente
había un abismo
Seguimos rodando en pánico
pero con tan buena suerte
que nos detenió una higuera
Nos repusimos y tomados de la mano
mordiendo la pendiente nos salvamos.
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