Antes de salir
a la selva, al monte, los caucheros emparedaban su dinero en sus casas sin que se enteraran
sus parientes ni nadie porque salir al monte era un albur, un peligro de volver
o no, sobre todo por la malaria y el bandidaje o traición donde la vida valía
nada. Es por eso que hoy, incluso, al
derrumbar las casas viejas de Iquitos en algunas paredes se encuentre dinero antiguo.
La selva del Perú para nuestro país ha sido nuestro sino:
1) de 1880-1915 con el apogeo del caucho 2) luego con el petróleo, ahora ya
casi extinguido 3) Y, hoy, aunque los gobernantes no lo consideran en la data
de ingresos al país, son recursos de dinero que ingresan con el narcotráfico.
Con éste, más con los ingresos de la minería, de gas, con los ingresos que
giran los connacionales de diferentes
partes del mundo el Perú no se tambalea y hay apetito de poder por estar en el
gobierno.
Brasil, si explayó sus limites territoriales fue gracias
a los bandeirantes, tipo caucheros, (haciendo una comparación con los cowboy del oeste americano) abarcaron, se
introdujeron y se apropiaron de la selva de territorios de Bolivia, Paraguay y Perú,
regiones totalmente abandonadas (en el caso del Perú los banideirantes que salían
de Río de Janeiro ocuparon Acre que
pertenecía al departamento del Perú, Madre de Dios.
Por el lado
del Perú es algo que no se dice pero es gracias a los caucheros peruanos, crueles, que sembraron el terror en
la selva como Julio José Arana o Fitzgerrald se contuvo y se expulsó la
avanzada de bandeirantes, sino no hubiese sido nuestra Iquitos y buena parte de Loreto.
Moyobamba era nuestra frontera viva antes del caucho.
Dato: Carlos Fermín Fitzgerrald http://es.wikipedia.org/wiki/Carlos_Ferm%C3%ADn_Fitzcarrald
nació en 1879 salió de Ancash
con dirección a la selva. Tenia 17 años.
Murió a los 35 años por salvar a un amigo cuando se ahogaba en un rio.
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