jueves, 9 de marzo de 2017

ZELI (Poemario) I

DELIRIO

I

Estoy muriendo en este hospital frío, triste, severo;
Sin embargo tú, amor mío, no vienes a verme
Me estoy muriendo y como nada puedo hacer
Doblo mi cabeza hacia la puerta de sala, y sueño:

Sueños de malla y tutú  que siempre quise hacer
Sueño volando haciendo plies a mis piernas                   
Calzado un leotardo morado con mangas
Pasos de media punta de punta hago
Coloco mi peso en el lugar exacto
Para no caer cuando termine la pirueta

Para llegar a ser excelente, dice mi ego –consuelo- 
He pasado ampollas callos y mucho desvelo

Sueños de malla y tutu que siempre quise hacer
Verídica  función- gala como si viviera cada pase

¡Vuela, vuela! oigo  clama la platea: sin embargo
Mis pies pegados siguen al piso a punta de dedos

¡Grande, única! ¡No hay bailarina como ella!, corean
Y en la butaca de primera fila, estás tú, Amator,

Eufórico, satisfecho, aplaudiendo a rabiar
Pero despierto, y…

Me estoy muriendo en este hospital frío, triste, severo;
Sin embargo, tú, amor mío, no me llegas a ver

En vez de amarte tanto,  obcecada y terca  
Hubiese dado vuelo a  mis sueños de malla y tutu.


II

Sueño ahora viajar en un tren australiano
abreacción(1) ilusoria mía sin restricción
desde Adelaida hasta la costa norte
donde
al sacar las manos por la ventana
por el sol intenso resquebrajan mis uñas

La tinta de  pluma que escribo mi bloc
mana y mancha mi mano
                     
Impúdicas  langostas en tiempo de celo
aparean  las barras metal de la riel
sin importarles ser aplastadas
muriendo miles por las ruedas de acero
Volviéndose  las vías resbaladizas
-eventualidad que el vagón descarrile-

Esto me hace sospechar sin duda
el presagio que  me espera
Mi cambio de residencia
El inmenso desierto que observo
¿No es lo más parecido a la planicie del arcano?

Oigo una humorística historia de antaño
Cuenta un señor sentado en mi frente:
Los aborígenes del lugar al ver serpentear
las columnas de hierro en forma de ese
-con personas en su interior, decían:-
Una serpiente hambrienta, vivos, se  los tragado
Pero no me río tal vez ya no tenga alma

En noche de lluvia
El yacimiento de sal
Es un lustroso espejo
que  refleja su destello
a  nubarrones henchidos
y en éstas veo alguna semblanza
de mi triste historia

Al abrir la mañana en un desierto sin fin
Me hace sentir ser una motita de polvo

Sin embargo, repentino  para el tren
en  medio del desierto ¿Qué ha pasado?
¿No sabe donde ir? ¿O, ya me van a dejar?
Me asusto y despierto
ensopado en frío húmedo.
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(1)Se denomina abreacción a la descarga de emociones y afectos ligados a recuerdos, generalmente de experiencias infantiles penosas o dolorosas.

Zeli /autor:Jrosual/ Marzo 2017


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