En nuestras
provincias hay hermosas celebraciones
como la Difunta Correa, esa joven mujer que parte con su bebé en busca de su marido
que ha caído prisionero. Ella cae muerta en el desierto pero, cuando la
encuentran, los paisanos afirman que la criatura seguía mamando de ella.
Del
libro La resistencia, Ernesto Sabato
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