Nicolás Yerovi, en julio de 1996 comenzó a escribir un libro intitulado Más allá del aroma. Al año siguiente es abordado por un anciano,
Alberto Alvarez, Calderón quien le
confiesa que fue amigo de su padre y le invita a su casa para charlar
sobre las anécdotas y peripecias políticas vividas con su padre que era
periodista. Nicolás Yerovi acepta
Y Nicolás lo frecuenta casi un año porque le gusta que
le hablen de su padre y las componendas políticas de esos años, mientras está terminando su libro Más allá del
aroma.
Y cuando tiene terminado el borrador, aun sin editar, entrega
a su amigo un ejemplar para que le diera su opinión
En 1998, Nicolás Yerovi edita Mas allá del aroma en
editorial Peisa en Colombia , y un día recibe la visitar del viejo Alberto Alvarez que había editado, él
también, Mas allá del aroma en el Perú con correcciones y anulados algunos capítulos.
Entonces la amistad
con el anciano se rompe
Nicolás Yerovi dice: Yo estudié doctorado en literatura
pero no psiquiatría geriátrica.
En 1999, febrero, ante el juicio que le empalmó Nicolás Yeroví, el anciano reconoce
que Nicolás Yerovi era el autor de la obra y al pago de $12.000
Pero a fines del mismo año el anciano le hace otra denuncia
ante Indecopi ( Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y
de la Protección de la Propiedad Intelectual)
pidiendo la opinión de un profesional para qué
deslinde la propiedad y éste opina que
el autor es Nicolás Yerovi. Pero por ese tiempo
la telaraña de Fujimori y Montesinos estaba metido en todo e intervino e indujo a que la sentencia sobre la propiedad el libro Mas allá del
aroma pertenecía a ambos.
Hasta el 2007 todas las decisiones de los
juzgados daban lo mismo: Autoría Compartida
hasta que ese año murió el anciano Alberto
Alvarez
Y Nicolás Yerovi
presentó un recurso de casación y, mientras tanto, mordaz sobre esa novela que le es de terror poder editarla está escribiendo
otro libro sobre lo acontecido con
aquella, se titula: El Escritor que se plagió a si mismo.
Ojalá que no le aparezca otro Alberto Alvarez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario