Si no hay ni para el taxi ¡qué hacer!
Mi corazón se desboca por salir
Las sienes palpitan, atropellan
estruja mis arterias la presión
¿Qué puedo hacer?¡Nada! Solo esperar
La pastilla ya no hace efecto ¡qué hacer!
Sin dinero para la consulta
en mi cuarto solo queda esperar
¡Para qué despertar a mi mujer!
le preocuparía, le quitaría su sueño,
fuerte, enfrentándomele, tengo que ser
que sepa no le tengo miedo a la parca
si se presenta le escupiré la cara
Al menos, supongo, por insomnio
me levantaré en esta madrugada
me abrigaré, empuñaré la pluma
escribiré mi última entrada,
inevitable, antes del patatús
Colapsará los chicotes de mi mente
y se atiborrará sobre mi carpeta
-sobre mi cuaderno mi libro mi lápiz
auxilio que ahíto estuvieron presente-
¿Qué puedo hacer?¡Nada! Solo esperar
No me asusta el límite de mi vida
al menos voy en las tres cuartas partes
confieso que he vivido, como dijo Neruda
solo que no he viajado tanto como él
pero él no tuvo el placer de la navegación
solo que el tiempo no me ha de alcanzar
todos mis manuscritos trasvasar
solo eso me acida, el resto no importa
¡Cómo me hinca al fondo del cerebro!
Voy tranquilo, a pesar, del escalofrío
a pesar de todo, la parca es lo más viable
Sin embargo, cuando sumiso dígole
- al entrar en forma de mariposa negra
y batir a media altura-: ¡Estoy dispuesto!
Al rato, se retira, mi pulso normal recupero
Pareciera que ella jugara conmigo
o
me obviara para que, aquí, sufra más.
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