¡Pobre mi viejo!, verle, daba pena
No haber su deseo correspondido...
Mi padre lloraba de cualquier cosa
hasta cuando restregaba el ojo,
mi madre, por alguna pelusilla,
le preguntaba "¿De qué lloras mujer?"
y sus ojos se anegaban de llanto
"La vejez -decía- es dura y cruel".
En su alcoba de su grande casa,
poco antes de perder su raciocinio,
ver, en las paredes, se acostumbraba:
visiones, anticipo del arcano;
entonces, yo, le reanimaba
le hablaba de su lejano pueblo:
- Padre, vamos en julio a viajar...
- ¡Para qué! si ya no puedo ni ver
" Me despedí de mi paisanada
¡Ya no quiero volver! -dijo serio-"
Y sus ojos en lágrimas se sumía
"Dos jóvenes -repentino, evocó-
querían botarme a la laguna,
después dirían se tropezó y cayó"
Reparo:" Cómo pueden hacer tal!"
"¡Claro que si! ¡No valgo, soy senil!"
Hay una laguna, al norte del pueblo,
regaba sus aguas la parte baja
Una plaza de toros hay al lado
Los jóvenes en tiempo de fiesta
danzan pasacalles, antes del rodeo.
"Querían botarme a la laguna..."
¡ Pobre mi viejo! daba pena oírle,
el mal, su juicio carcomiéndole.
Siempre, bien, refería a su paisano
hora, como insanos reportaba
Llamaban a la mesa para el almuerzo
extendí,yo, mi brazo de ayuda
decía "¡Deja, con el bastón puedo!"
y sus pasos acalambrados, daba
De las últimas veces que le vi, fue,
de pie, antes de su postración , lo sé
Primer Dia el padre, sin él, huérfano
me siento vacío sin su presencia
"Que voy bien", le sería mentiroso
solo le pido que cuide a mamá
salud buena a los míos, al hermano
(Vamos por los seis meses a la sierra) (1)
"¡Chendo, salud en tu día promoción!"
solía decirme con entonación.
(1) Pensamos ir todos los hermanos, mi madre,
a celebrar la misa de medio año en su pueblo.
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