El desapego a la ley ( venta de libros, dvd piratas,
etc.) nos lleva inevitable a una dimensión más espiritual de la vida en
sociedad .El gran desprestigio de la política se relaciona sin duda con el
quiebre del orden espiritual quién en el pasado , por lo menos en el mundo occidental,
hacía las veces de freno a los desbordes y excesos que cometían los dueños del poder. Al desaparecer aquella
tutela espiritual de la vida pública, en ésta progresaron todos aquellos demonios que han degradado la
política a inducir a los ciudadanos a no ver en ella nada noble y altruista
sino un quehacer dominado por la deshonestidad.
La cultura debería llenar este vacío que antaño ocupaba la religión pero es
improbable que ello ocurra si la cultura
traicionando esta responsa bilidad se orienta resueltamente hacia la facilidad, rehuye los problemas más urgentes y se vuelve mero entretenimiento.
Mario Vargas Llosa
No hay comentarios:
Publicar un comentario