Hace falta un mercado
que esté abierto todo la noche
pero no de esos mercados de lujo, de apartamentos sino un mercado de
pueblo, un mercado (tipo) de barrio
donde a las tres de la mañana, por ejemplo, ahora que no tengo sueño, pueda ir
a pedir que me preparen una ensalada de fruta, compartir un asiento, un trago con otro noctámbulo oyendo en vivo
algunos cantantes de música criolla o un
mariachi con inolvidables rancheras, comprar libros de segunda, entrar a una
cabina de internet , ya que en casa hay personas que se molestan estar
despierto en la noche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario