miércoles, 18 de julio de 2018

Solina XXXIV



P2

XXXIV

Al igual que tú, ahora pienso
Una réplica en sentir opuesto
Lo nuestro se hacía largo
Me estaba volviendo viejo

Entonces tomé una del redil
los dientes a la jaca alazana le vi

Era joven, muy jovencita para mí
Pero dije, a mi albedrío la domaré
Por el sendero luminoso la guiaré
Tenía lo más incorruptible de un ser
Su juventud

Apenas salía de la pubertad
Difícil compromiso no pensé

Endilgué a deberes consagrados
Rápidamente con dos criaturas,
¿Lo filial es contramuralla
a la vida deseada?-así pensaba-
Son cuerdas paralelas
No quise jamás desampararlos
Hasta ahora velo por ellos

Sabes, aquel tiempo
No nos quedaba tiempo
para las cuitas de amor
Como si el mundo fuera acabar
Qué locura por hacer dinero

Y si se acababa ¿para qué serviría?-
¿Por qué pusimos al amor en la lista de espera?

Comprendí que te abstuvieras
No era así con otras: dunga dunga
Porque yo te quería como esposa
por eso pacientemente  te esperaba

Vino la otra como tromba, no se hizo mundo dar
Se dejó sembrar mieses por atraparme 
Quisiste reaccionar pero despechada huiste
Ofreciendo tierra para que la plantara otro amor 

Tu primer exilio –de  varios- duró tres años;
Volviste resignada con el corazón a tajos
(restos de escaramuzas) dispuesta a recuperar tu sitial
Pero ya no era lo mismo, era el reverso del cielo
Cometíamos  -a limón- infidelidades

¿O, es que volvías hacerme la vida a cuadritos?
¿O es que querías indemnizar tus años perdidos?
Y ese amor singular que  tuvimos al inicio
trocó a púas, amor a navajas amor a perro
Mi situación liada te propendía a otras aventuras
al punto con el desparpajo una vez me retabas:

¿Crees, no merezco otra suerte? ¡Equivocado estás!
Y reías perversa como estrella de Alfred Hitchcoot

¿O querías en el fondo, sin darte cuenta,
Mostrándote mala mostrar tu lado bueno?
¿Ex profeso te mancillaba para dar  paso
a mi felicidad con Gelsomina?

A pesar, que los garitos dejabas sin gazapón 
No quise dar razón a tu actitud

No te creía, para escarmiento te esquivaba
Como si tuvieras un telón en los ojos, repelías
Y yo me anidaba en la aporía de la pasión
Me anidaba del polvillo de flor en flor

Borrachera de tálamos, no tenía contemplación
No contentaba con la que ya paría en casa.

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jrosual

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