martes, 27 de enero de 2015

Samaca

La camioneta se introduce al desierto
El tablazo de sal en Ica, al sur, es firme
Por una carretera imaginaria  paralela
Recorre  Ocucaje, Callango,  Ullujaya
Conduce  el  poeta y filósofo a su refugio
Hace una visera con su ancha mano y ve,
Al final,  el milagro verde entre cerros azules;
Y en el camino, alcayota y silvestres tomatillos

Había visitado Samaca cuando pequeño
Le traía, antes, su tío Pedro Cabrero
Acá te vas a venir a vivir, solía decirle,
Alberto, se decidió a los sesenta años
El suicidio de su primo, tuvo algo que ver:
Marcó la vida del tío cabrero y la de Alberto,
El tumor que desarrolló uno de sus hijas,
Además, le llenó  de  rabia a don Pedro:

¡Tantos pollos con papa frita!, maldecía,
¡Tantos huevos de gallinas torturadas!
Eso terminó con mi hija en el Neoplasia



Y, eso, confluyó adquirir la parcela del tío:
Sostenido por horcones de huarango
Con barro y poña las paredes de caña
Solo tiene la casa, cemento en los zócalos,
A don Alberto,huir de los teléfonos le urgía

Cerro Cuchillo, Cerro Sapo, Cerro Puma,
De molles su edén, su creación, su mundo
Aroma de  veinte mil huarangos ¡Albricias!
Olivos  que mandó traer de lejos, Israel,
Ocho mil  árboles que dará aceite virgen
¡Treinta mil  litros por año producirán!
¡El Perú fracasado hagamos otro!, dice, y
El sol agoniza rojo sobre la lomas de Amara

Treinta  hectáreas bañada una vez al año
Por el río Ica, solamente, en cada verano
Si no hay agua la gente sale  ha huaquear:
Por el país dos cosas: sequias y bibliotecas

La semilla de algodón que tiene  en la mano
Por él pregunta ¿cada cuánto tiempo sembrar?
¿A qué profundidad  la semilla enterrar?
¿Cuánta agua necesitará? ¿Cuanta cosecha dará?

Los políticos de mi clase social, alta
Con la estupidez cortesana limeña
Ya se olvidaron de temer a Velasco
Y han vuelto a cacarear lo mismo;
Mismas fiestas, mismas  ridiculeces
Misma fanfarria, la misma frivolidad:
Es la burguesía  irresponsable del Perú
Desconfío radicalmente de ellos

Mas allá del cariño que doy a unas personas
Entre ellos, mi padre,  hombre correcto 
Siempre ha buscado el bien común 
Gustaban los minerales, a mi me asustó,

Cuando joven, una vez me llevó a los socavones .
Si te dedicas a la filosofía te vas a morir,decia
Cuando descubrió la mina de oro, no dijo nada
Yanacocha le produce las veta más grande de oro

El campo es santo, la ciudad no tanto
Mis cerros, Ocucaje, aun, más míos, 
Porque nunca los podré comprar
Prefiero recoger ilias en ullujaya
Que andar pateando latas en Lima
Nada me inspira más que caminar;
Caminar y no pensar es marchar,
Por eso los militares no piensan.

 (Alberto Benavidez Ganosa Enseñó 25 años en PUCP Me despidieron, dice, porque no jalaba y les malograba las estadísticas. Creó el colegio Los Reyes Rojos en 1977 con Constantino Carvallo. Creó el Centro Cultural Antares
Su padre, el minero Alberto Benavides de la Quintana descubrió la mina Yanacocha  que produce oro.


No hay comentarios:

Publicar un comentario