3
La conoció hacía varios años
Rondaba el frontis de un lupanar
Aunque recuerda esa primera vez
la vio recatada en su vestido
Miraba la escalerilla del antro
Desde el borde de la vereda
Con singular particularidad
Quería hablarle a su parvedad
-Sorprendía su ensimismamiento-
pero varado prefirió observarla
qué determinaba desde la calle,
a la duda, a la curiosidad extrema
Parroquianos subían con sus parejas
Que las contractaban en la calle
Entonces decidió subir sola
para indagar seguramente
Cómo se empieza ese oficio
Le siguió por atrás para decirle
Niña buena allí no subas
A la mujer allí degradan
Allí se prostituye el alma
Allí la esclavitud legalizan
Pero ella una ventanita alcanzó
donde un ogro chino regía
Delante de éste, a los flancos
dos zambos de cuidadores
Que presto vieron carne fresca
Y llamaron a otros bacanes
y pronto se formó cola tras ella
Y la llevaron al cuarto del fondo
Ante el celo de las vecinas
Que se quedaban sin clientes
Aquella tarde parado a la vereda
Telmo lamentó no haberla llamado
-a tiempo- Quizás si le oía impedía
traspusiera esa inmoral
marsopa
La esperó sendas tres horas
No porque quería profanarla
Sino tal vez pudiera animarla
a que enmendara su vida
Cuando la niña bajó ya no era niña
Ya no aromaba sino a olor de fango
a marisco botado por podrido
Desequilibrada bajó la rampa
Cubrió la faz a invisible
pañuelo
y corrió varias cuadras al este
mientras Tel la seguía, la llamaba
Ella volteaba y hacía señas
Ya no
ya no, ya no… y su voz
se perdía
Desde esa vez acostumbró buscarla
en la tercería buen tiempo, al salir
temprano de su trabajo, hasta que
la halló un día pero no le reconoció
y él prefirió callar, no decirle nada
4
Algo protervo esos días le atrapaba
Buscaba a Mery Trix por la casona
Que haga olvidar su amor trabado
Como si un clavo sacara otro clavo
No está, buscaba otra remplazo
Debía tener su talante oscuro
Pero tozudo araba la mar rosa
Al final se rindió hecho una loza
Va a la vecina de sonrisa gingival
la de ojos rientes, le llene de amor
Le dure una semana ese vil calor
Hasta regresar a su flor de azar
Ha perdido la capacidad de loar;
Con su manera de moverse, una,
La otra, con sus dientes mazorca
El jardín de sus águilas
es mejor
Nunca consideró divisas a éstas
Ellas obraban como sanguijuelas
Querían pervertir, enviciarle más
perdiera lozanía sus años jóvenes
A cada demolición, cada agonía
Como si quisiera abatir la flor
A cada águila fiera no cejaba dar
Ora al revés, era él quien no se iba
Como si salir de ellas aturdiera
Alcohólico feliz con sus amigas
Pero al volver a casa ¡lombrices!
¿Iría al cielo? ¡a cielo errado
iría!
Lloraba al desconcierto como si
hablara desde Sodoma a Dios
como si quisieran echar luminol
al gran peto del fantástico Yeti
A pesar, va metido a su neurona
que guardar fidelidad evita el mal
cultivar firmeza labra el carácter
más no sabía cómo a ello llegar
Anómalo proceder se daba cuenta
No constreñía solamente a Flor
Rolling in the Deep, su parte
vital
¿Cómo combatirla?, se quejaba
La flaquita del rosal de boca grande
cuello de gansa y dientes de mazorca
le miraba perpleja y no le entendía
Se movía más, creía por su mal arte
__
Autor jrosual / julio2017
No hay comentarios:
Publicar un comentario