martes, 11 de diciembre de 2018

Poemario FINAL 57 (continua)


Abajo en el campo el partido iba empezar
y nos esperaban a Johnny y a mí
Me dieron la bienvenida Y empezamos a jugar
Contra Los amotinados del Frontón
Que eran provincianos de recio porte

Rosado, el del canino ausente
Con su cara redonda y trigueña
Gambeteaba por la derecha

Se la da a Nico, el chino del barrio
El que era bueno en todo
En el trompo, las canicas, las cartas
En los números –incluso- en el colegio

Pero el vicio al licor lo malogró
Alcoholizado temprano murió

Hizo que iba retroceder la pelota
Pero luego taqueó corto a campo contrario
-dándose  pase a sí mismo-
Y dándose la vuelta  completa

Sorprendiendo a los adversarios que no adivinaron
Y con el rabillo me hace seña a que perfile adelante
Adivino, corro, el arquero también, llego antes
Pico la bola dejando al arquero agarrando aire

Pero la pelota se quiere ir fuera del campo
Le alcanzo y libre de marca
Despacio, la empujo al arco, ¡Gol!

¡Gol!, repiten mis amigos
Vienen todos a felicitarme 
Johnny me dice ahora:
Ese mi amigo Beckenbauer
-admirador de los alemanes, siempre-

Nico con su risita a cuye,
Vecino, el cholón  de construcción civil
El que tenía más edad pero de hablar dulce

El flaco Sixto que sufría de TBC
No por ello dejaba la pelota jugar
Siquiera medio tiempo
Después pedía cambio
para inhalar Salbutamol

Cala, Chino, los pericotes del barrio
Alejo, el fosforito
Al que lo bueno le parecía malo
Y lo malo peor

Rey, el hijo del tendero
Amado, el niño bueno
El Pata dura,  que de niño sufrió polio
Y con una prótesis de fierro jugaba

Yo estaba feliz
Old men are twice children
(El hombre viejo regresa a ser niño)

Todos me abrazaban festejando el gol
Entre el cruce de brazos
Veía a Rina y sus hermanas
En la pérgola Mirador de luz
Gritando ¡Alcibíades… Alcibíades!


FIN


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autor Jrosual

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