El amor, una metafísica
…
-Pues, sí, yo creí que seria todo lo contrario; que cuando uno se
enamora de veras es que concentra su amor [en la tal Eugenia], antes desparramado
entre todas, en una sola, y que todas las demás han de parecerle como si nada fuesen
ni valiesen… Pero ¡Mira! ¡Mira ese golpe
de sol en la negrura de su pelo [de esa otra morena que pasa, casual, por la vera de ellos : Augusto y su amigo
confidente]
-No; verás [responde el amigo], verás
si logro explicártelo. Tú estabas enamorado sin saberlo, por supuesto,
de la mujer, de la mujer, del abstracto,
no de ésta ni de aquella; al ver a Eugenia, ese abstracto se concretó y la
mujer se hizo una mujer y te enamoraste de ella, y ahora vas de ella, sin dejarla, a casi todas las mujeres, y te enamoras de la
colectividad, del género. Has pasado, pues, de lo abstracto a lo concreto, y de
lo concreto a lo genérico, de la mujer a una mujer, y de una mujer a las
mujeres.
Del libro Niebla de Miguel de Unamuno
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