Un cuadro que había bajado de su pedestal
para limpiar con waipe y ron...miro:
Una finta de toreo, capa extendida en el brazo,
los cuernos del animal raposeados por el rojo capote...
En el reverso del cuadro se lee de puño y letra de mamá
sobre una esquina del papel amarillo ocráceo
(Mi madre había regalado ese cuadro a mi hermana):
"Hija:
Un grato recuerdo de aquella corrida que expectamos juntas...
Bravura de animal que nos embargó de emoción mirar
al lado de tu esposo en el Acho de Quinches...
-y, simbólicamente apuntala:-
No te dejes coger por las astas del toro:
la malas lenguas, los que desean lo malo
Entrégate o déjate coger por las palabras de Dios Padre;
-entonces, mamá recuerda su operación a la vesícula
por la que, esta nota, tiene mas o menos diez años:-
Cuando el dolor me consumía en ese trance
murmuré tu nombre para aliviarme
e irme en paz , pensaba, a la otra vida."
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