RINA Y SUS HERMANAS VII

VII

Después del sueño esa mañana se preguntaba:

¿Podía faltarle, hoy, revelando que la amaba?

¡No, mil veces no! Ni palabras concesivas

Ser maduro es ser prudente en las palabras

Faltaría a una de la calle que recién conociera

Pero no a una que creció en  su  pubertad

Amor silente y torpe que no supo lidiar

Aun así, amor platónico, dulce de su mocedad

Sin embargo, ese amor diáfano algo pedía

Vasija de agua pura en su historia arcaica

De cuya poza  fresca anhelaba  algo beber

Estaría incompleto si no lo emprendía

Pero no la veía cómo el viento la despeinaba

En su oscura vida actual pertenecía al albor

Pero había algo que le empujaba a esa luz

Lo intentaría para certificar lo que soñaba

Tal que al Ahecho se vaya tranquilo

Si no lo aventurara todo esfumaría

Rina cuatro letras que le danzaría

Mirándola, sentado, Elio en su palco.

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autor Jrosual