No me dijo una sola palabra solo: ¿Bailamos...?
No pude decir que no, no teníamos quince abriles
No era una flor en botón, cierto, pero tampoco
para uno en el climaterio No obstante accedí.
La tomé de las manos, lenguaje mudo de manos
Recibía mi temperatura acelerada y frágil
Pequeño balanceo a los lados, así nuestros pies despertaran;
luego atrás y adelante: lento atrás, rápido adelante,
(quién sepa caminar podrá bailar, recordé una película)
Veloz, veloz al costado, retroceder con delicadeza
Encontrar la simbiosis, la unificación de paso
luego el baile, en si, era llevar llevarla, fácil,
por los confines del salón
No era dominarla, era llevarla y ella entendía muy bien
No era subyugarla sino que me siguiría simplemente
Si un danzarín respeta los modales en un baile de salón
-recordé otra cita de aquella película con Toño Banderas-
inconsciente respetará en su vida privada a la mujer.
por ella moveria mar y tierra
enmendearia mis puntos debiles mañana mismo
enmendeariame cosqa que ella notueveira que objetarme
ingresaria a las fauces de la envida de la competencia
haria cuanto pudiera para ganarmela de verdad
pero que pena se acbo la piez musical
y no podia aocsarl con la mirada
que bonita mujer
pero no es bonita para villafana mi amigoi
ni para cualquiera
pero para mi gusto si
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