Autos
híbridos
En
el caso de la tecnología hibrida de Toyota –a la que pertenece el Lexus- el
motor arranca siempre en modo eléctrico y puede llegar hasta los 50 kilómetros por
hora en ese modo. Funciona con energía por batería, lo que significa cero emisiones
de gases contaminantes y una circulación sin ruido de motor.
Cuando
supera los 50 kilómetros automáticamente –eso lo determina la computadora del
auto- entra en funcionamiento el motor a gasolina y asiste al motor eléctrico, y le agrega
potencia para que pueda desarrollar mayor velocidad final.
Este
Lexus no se enchufa sino que su motor eléctrico se recarga cuando desacelera o
se detiene. Si va cuesta abajo, aunque vaya a más de 50 kilómetros por hora, el
motor eléctrico empieza a girar en sentido inverso y en vez de consumir energía
la genera. Lo mismo ocurre cuando se pisa el freno, toda la energía de la fricción
del frenado se traslada a la batería…
Por la reducción
en la combustión de gasolina, un vehículo de este tipo, contamina 40%
menos que un normal…
Si
vas con un hibrido de las características de Lexus un viernes a las seis de la
tarde –hora punta- por la avenida Javier Prado es posible que vayas en modo eléctrico hasta La Molina porque
nunca rebasaría los 50 kilómetros. En este
caso, mientras los auto convencionales quemarían gasolina en cada parada, el
hibrido no contaminaría nada.
Un Toyota
Lexus CT200 H, cuesta 39 mil dólares
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